Hace unos días encontré un texto que escribí hace tiempo. Ha sido muy grato para mí recuperarlo, no sólo por los recuerdos que me evoca, sino porque tiene algo diferente (que no les puedo revelar y que les invito a descubrir). Disfruten de la lectura. Tu mirada fija. Lentos gestos saboreando el momento, calculando el ritmo de la conversación, la entonación de cada palabra, cada movimiento, la elección de lo que decir... Te sigo mirando, a la espera, tranquila, ralentizando mis pensamientos, contemporizando tus leves y suaves gestos mientras que intento mantener mi imagen de firmeza, de confianza, de fingido interés. Tocamos varios temas: triviales, absurdos, normales, algunos de cierta importancia... Pero no te engañaré: son todos excusas, pretextos estúpidos para camuflar el ávido deseo, para estar allí los dos, uno frente al otro, deseándonos con la mirada, impacientes por que se produzca un roce, un acercamiento, una casualidad que nos haga abandonar nuestra careta de amista
Osado, imprudente y temerario lector. Está usted a punto de adentrarse en un mundo desconocido,donde la tristeza y la pasión son inseparables. Un mundo repleto de gemidos en la noche, jirones en sensibles corazones, insomnio y duras lágrimas sobre intencionadas miradas. Un mundo de maliciosas gotas de sangre, rosas con espinas y educadas sonrisas tras cada venganza. ¿Se atreve a entrar? Benvenuto nella Cosanostra.